La hiperconectividad: transformando el sector energético
El concepto hiperconectividad se ha utilizado para describir las múltiples formas de comunicación que las personas mantenían a través del correo electrónico, las redes sociales, internet, las videoconferencias, los mensajes de voz, entre otros.
De acuerdo con una investigación de la firma McKinsey, el impacto económico total que tendrá el Internet de las Cosas al 2025 estará entre los 3,9 billones de dólares y los 11,1 billones de dólares. En Centroamérica, se espera que el mercado de IoT alcance un valor de $4.2 mil millones para 2025, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 25% entre 2020 y 2025 según datos de IDC.
En el ámbito energético, se estima que, para este mismo año, más de 75 mil millones de dispositivos estarán conectados a nivel mundial, muchos de ellos dedicados a la gestión y monitoreo de la electricidad y la energía.
Los impactos de la hiperconectividad en el sector energético son profundos y multifacéticos. Desde una mayor eficiencia y confiabilidad hasta una mayor seguridad y sostenibilidad, cada avance nos acerca un paso más hacia un futuro energético más resiliente y equitativo.