El rango de tensión de empleo de la bobina varía según la frecuencia de la señal (es mayor a 60 Hz que a 50 Hz). Luego, una bobina de 230 V / 50 Hz, tendrá una tensión de empleo de unos 250 V a 60 Hz, aproximadamente. Si no se tiene este detalle en cuenta, y se emplea a 60 Hz dentro del mismo rango de tensión que para 50 Hz, ésta no tendrá suficiente fuerza para cerrar los polos del contactor (si fuera a la inversa, se quemaría la bobina). Es por eso que se recomienda el empleo de bobinas bifrecuencia (50 / 60 Hz) o utilizar éstas dentro de sus valores nominales de tensión y frecuencia de empleo.